miércoles, 17 de agosto de 2011

Federico García Lorca.

Cuando era pequeña, en el colegio, odiaba la asignatura de Lengua y las veinte obras de cada autor que me mandaban memorizar para los exámenes. Me pregunto ahora, años después, por qué no lo que nos mandaban era leer las obras en vez de aprender títulos que luego escupiríamos en un papel. Preguntas sin respuesta del sistema educativo en general y de la que fue mi profesora de Lengua en particular. Creo que de esa forma, en vez de odiar la asignatura, hubiéramos disfrutado con ella. Lo único que recuerdo de Lorca de aquella época es repetir mentalmente antes de un examen: Poeta en Nueva York, Romancero gitano, Bodas de sangre, La casa de Bernarda Alba...
Si, esto va de recuerdos, pero no de recuerdos de mis días de colegio, sino del recuerdo de una persona pequeña que hizo cosas grandes. Federico García Lorca murió fusilado durante la Guerra Civil, una madrugada el 17, el 18 o el 19 de aquel Agosto de 1936. Después, su cuerpo se enterró en alguna fosa común y todavía hoy sigue viva la polémica sobre su paradero exacto. Hoy, que se cumplen 75 años del asesinato de uno de los poetas y dramaturgos más influyentes en la literatura española del siglo XX. Me pregunto ahora también, años después de haberme pasado horas delante de los apuntes memorizando los títulos de sus obras, por qué las guerras, al igual que las drogas, se llevan del mundo a personas que todavía tienen tantas cosas por decir. El poeta granadino Luis Muñoz dice de él "Poetas españoles consagrados y de todas las generaciones coinciden en la magnitud del poeta, al que algunos consideran no un escritor contemporáneo, sino como un poeta descolgado del tiempo, un clásico". 75 años después, Lorca sigue siendo un clásico inimitable. 

El programa Historias de papel, de Rne, hizo un especial dedicado al 75 aniversario de la muerte de Lorca. 
En él habla Miguel Caballero, autor de "Las trece últimas horas en la vida de García Lorca", libro en el que aparecen por primera vez los rostros de las personas que formaron parte del escuadrón que fusiló a Lorca y responde a todas las incógnitas sobre su muerte, y también Carlos Hernández, autor de "La Huella de Lorca".
Un programa muy interesante, os lo dejo aquí por si tenéis un ratito muerto y queréis escucharlo.

martes, 16 de agosto de 2011

Recordando a Elvis.

No escribo tanto aquí como me gustaría, pero mis exámenes de Septiembre y mi aburrido y ajetreado verano gallego me tienen absorbida. Aunque más de una vez me he sentado delante del ordenador para intentar hablar de las cosas que pasan y las que no pasan... De un hombre, que se hacía llamar "cazador de marxistas", que se volvió loco en Olso y mató a 93 personas, del adelanto de las elecciones, del desalojo de Sol, de la visita de nuestro querido Papa... pero al final siempre abandono la idea porque me puede la pereza y las ganas de tirarme en la cama a escuchar alguno de los muchos discos robados a mi padre este verano. Así que para eso, para hablar de música, es para lo único que saco tiempo, y más hoy. Tal día como hoy, hace 34 años, moría el rey del rock. Elvis Presley era encontrado muerto en el suelo de su cuarto de baño. El consumo de drogas se dice que fue la causa de su final, como el de muchos otros genios, pero también se sostiene la teoría de que Elvis huyó a Argentina bajo el nombre de John Burrows y siguió vivo con otra identidad. Incluso hay gente que creen ciegamente en que Elvis sigue o, al menos siguió más tiempo, entre nosotros. La fe, que mueve montañas. Su vida fue un camino de melancolías, su nacimiento con un gemelo que murió en el acto, los excesos de la fama, la muerte de su madre, sus adicciones... Es conocida la historia de que Elvis se presentó en la Casa Blanca para hablar con el presidente Nixon sobre su preocupación por los jóvenes que consumían demasiadas drogas, consiguiendo así una placa de policía antidrogas, pero también es conocida la adicción del Rey a los psicotrópicos, causa de su muerte. 
Llegados a este punto, y después de ver a muchos otros "reyes" caer por la misma razón, me pregunto como debe de ser la fama. Cuan grande será el grado de soledad y vacío que sienten en su vida nuestros héroes, los autores de esas canciones que tantas generaciones después siguen volando la cabeza de quien las escucha. Por qué todos nos abandonan jóvenes perdiendo así años y años de reglarle obras de arte al mundo. Desde aquí mi pequeño y humilde homenaje para recordar al rey del rock and roll, ese chico que con 19 años cambió para siempre la historia de la música y revolucionó y escandalizó a partes iguales el mundo con sus caderas; era Elvis the Pelvis.